Y no es porque le pase nada, es porque lo quiero como si fuera mi hermano pequeño y porque me apetece escribir esto desde hace tiempo.
Tengo un amigo, bueno es mas que un amigo, creo que si hubiese tenido un hermano pequeño, me habría gustado que fuera como él en todos aspectos incluso cuando se pone terco como una mula y entonces es peligroso. Personas que leen el blog, que me conocen, me han preguntado en algún momento, porque me dio por escribir y plasmarlo todo en escritos y sobre todo porque escribo cosas de Sástago y no de Zaragoza de donde soy oriundo.
Bien soy nacido en Zaragoza pero no en la maternidad como casi todos los niños de entre 0 y 35 años de todos los pueblos cercanos a Zaragoza. Yo nací en el barrio de Torrero en la Av. de América concretamente en el nº 83, enfrente a la cárcel por más señas, cuando la calle estaba adoquinada y el tranvia del cementerio funcionaba a pleno rendimiento.
Pero eso solo significa que soy Zárágózánó, con cinco acentos, y que quiero la tierra donde he nacido, como el Sastaguino quiere la suya y que escribo sobre mi tierra dentro de mis limitaciones como escritor, naturalmente.
Pero eso solo significa que soy Zárágózánó, con cinco acentos, y que quiero la tierra donde he nacido, como el Sastaguino quiere la suya y que escribo sobre mi tierra dentro de mis limitaciones como escritor, naturalmente.
Pero hace mas de 35 años conocí a un Sastaguino, el estaba entonces haciendo el servicio militar obligatorio en aviación, yo acababa de hacer la mili en artillería en la Torre del Abejar, entonces a los de Sástago los enchufaban en aviación alguien del cuerpo, porque en esas fechas conocí a un montón de gente de Sástago haciendo la mili en aviación. Bien el caso es que conocí a Jesús Minguillón cuando el festejaba con Milagros que era prima de la chica con la que salía yo Mª Elena, y cuando Milagros subía a Zaragoza iba a casa de su prima y como yo tenia coche pues las recogía a las dos y nos acercábamos a buscar a Jesús al cuartel y nos íbamos a festejurriar por alguna discoteca o sitio de moda, hasta la hora en que lo devolvíamos al cuartel y yo me encargaba de dejar a buen recaudo a las dos damitas que nos hacían felices aquellos días.
Conforme pasaba el tiempo, Jesús, Milagros y Mª Elena me iban acercando a Sástago y a un grupo de amigos que formaban un circulo. Carlos, Maite, Paco, Rosita, Pepe, Pili, Antonio, Hortensia, Manolo, Mª Carmen. Y alguno mas que se juntaba de forma ocasional. Así se formo el círculo mágico, esos fueros los integrantes de unos años inolvidables. De hay salio una peña, la Peña Tropical, salieron buenos amigos, entrañables y salieron las mil y una anécdotas en las cuales se generan todas esa historias que cuento y que me hacen nombrar a Sástago mas que a Zaragoza.
Pero eso no quita para que de vez en cuando surja mi vena zaragozana y escriba sobre mi ciudad o sobre mis amigos de ciudad que también los tengo, o sobre las mil y una anécdotas de los compañeros de la empresa en la que llevo mas de 40 años trabajando. Bien, ahora toca Jesús, que puedo decir de el, un tipo honrado, listo, buena persona, de los que se puede confiar en el. Muy Sastaguino, de los que les gusta hacer que el forastero que no ha pagado la manta se acuerde que tiene que pagarla. Pero jamás en mi vida he conocido un tipo así.
Una persona así no se encuentra en cualquier sitio, es un tipo especial me siento halagado sabiendo que el me quiere y me aprecia, sabiendo que me puede confiar lo suyo igual que yo a el lo mío, eso no se dice de cualquiera.
Jesús ha sabido inculcar a sus tres hijos sus mismos principios y Javier, Héctor y Sergio, son una copia exacta de todas las cosa buenas que su padre Jesús y su madre Milagros les han enseñado en estos años.
Jesús ha tenido una influencia positiva sobre mi, en cuanto a Sástago se refiere, ha sabido hacerme sentir como un Sastaguino más, aunque se cansa de decirme que soy forastero y que no he pagado la manta, y que si no fuera porque mi mujer, que es nacida en Sástago, me habría tirado al Ebro.
Bueno a pesar de eso, que estoy convencido que lo dice con la boca pequeña. Se que me aprecia y sabe como soy en realidad, supongo que el tendrá un concepto de mi parecido al que yo tengo de el, fruto de todos estos años de convivencia. Que sea el, quien los relate si quiere algún día.
El caso es, que cuando analizo las historietas escritas, siempre aparece Jesús en ellas.
Esta vez le toca leer, el es el protagonista y sobre el tengo que decir varias cosas: Es noble, leal, honrado y ojala se presentara a alcalde de Sástago estoy seguro que seria el mejor alcalde que haya tenido nunca Sástago, es una idea, pero una idea basada en hechos. Si os dais cuenta, Jesús es un tipo que no le gusta figurar en nada, pero fijaos bien. ¿A quien intentan convencer muchas comisiones de festejos para que participe y los ayude?. En un momento determinado, cuando el equipo de futbol necesito un presidente, el agarro la batuta, se armo con gente que sabia de futbol, y trabajaron juntos para que el equipo saliera adelante y durante unos años formaron un buen equipo en la categoría que militaban.
Son dos ejemplos de los muchos que podría relatar en este escrito pero se haría muy largo y no se escribir mas allá de de una cuartilla, solo diré, según mi criterio, que tipos así hacen falta en un pueblo como Sástago, en que la falta de proyectos y empresas hace que la población sea cada vez menor porque los jóvenes no se asientan en el pueblo, y necesitan de gente fuerte como Jesús Minguillón, que sean capaces de asumir responsabilidades, sacarlas adelante y encabezar nuevos proyectos.
Claro que hay personas validas en el pueblo capaces de hacer lo mismo, por supuesto que las hay, pero yo quiero hacer valer a mi amigo Jesús, el que quiera hacer valer a otra persona pues que haga lo mismo que hago yo.
Estoy convencido que si Jesús se animara a coger la batuta de su pueblo, saldría elegido y estoy convencido, que los años que Jesús gobernara su pueblo, lo haría con toda la honradez y justicia que siempre le han caracterizado, y que los beneficios que el pueblo obtendría serian innumerables.
Como no soy muy bueno escribiendo, se me acaban los argumentos, no las cosas que podría estar relatando sobre mi amigo Jesús Minguillón, solo quiero decir una cosa más y es la ultima.
Es un honor para mí que él, me considere su amigo.
Honor y Gloria Sastaguino.
Los Sastaguinos, al igual que hacían los Espartanos, no preguntan cuantos son el enemigo, sino donde están.
(José Benito)
Tertulias de La Manqueta
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