18 de octubre de 2010

Nueva Web del Monasterio de Piedra

Estimados Amigos de Tertulias de la Manqueta,

Mi nombre es Adela Alciturri y os escribo desde el Monasterio de Piedra, desde hace unos meses seguimos asiduamente los contenidos que posteáis en Tertulias de la Manqueta, creemos que son contenidos muy frescos y actuales. Gracias por el empeño que ponéis en ellos, es una delicia leeros.

La razón de que me ponga en contacto con vosotros es que acabamos de lanzar nuestra nueva web del Monasterio de Piedra y nos gustaría compartirlo con vosotros por si consideraseis una noticia digna del interés de vuestros lectores para publicarla en http://tertuliasmanqueta.blogspot.com/.

Así mismo inauguramos también nuestras redes sociales, en una nueva etapa en la que queremos estar más cerca de nuestros seguidores y visitantes

Monasterio de Piedra en Twitter

Monasterio de Piedra en Facebook

Quedo a vuestra disposición para cualquier cosa que necesitéis y os doy las gracias por adelantado, por ayudarnos en esta nueva etapa del Parque.

Un abrazo

Adela Alciturri
Equipo Web www.monasteriopiedra.com

Es un placer para las Tertulias de la Manqueta ayudaros a publicitar un lugar tan entrañable como es el Monasterio de Piedra.
Es posible que dentro de poco nos ayudéis en vuestra Web a publicitar nuestro Monasterio de Rueda, con otras peculiaridades pero tan hermoso como pueda ser el vuestro.
Tertulias de la Manqueta queda a vuestra disposición para publicar cualquier noticia que estiméis oportuna.

Un fuerte abrazo de las Tertulias de la Manqueta.

14 de octubre de 2010

Luis contra el Terror

Horario laboral. Una jornada apática, de vuelta de fiestas del Pilar.

En mecanización inician una orden de fabricación que lleva tiempo retrasada y que quiero auditar, ya que en la anterior se mecanizó mal.

Entro al laboratorio donde tenemos la máquina de medir tridimensional, enciendo el ordenador y la consola de datos y abro la llave del aire.

Por el rabillo del ojo veo algo en el suelo. Miro y es un gran gusano rosáceo, de unos tres centímetros de largo al menos, arrastrándose por el suelo verde del laboratorio. Pego un salto y una punzada atraviesa mi estómago, a la vez que suelto un pequeño grito.

Por motivos no conocidos, tengo, digamos, cierto temor a los insectos. Cuando los veo, algo primario se acciona dentro de mí, provocando una sensación de desasosiego mayor que cuando veo a Aznar en televisión.

No a todos, el otro día estaba en el baño, con lo pantalones por los tobillos, y había una polilla revoloteando las bombillas. Sentí una leve inquietud, pero nada más, pude acabar mis quehaceres sin mayor inconveniente. Mayor desamparo e indefensión que estar con los pantalones bajados seguro que hay, pero ahora no se me ocurre.

Las moscas tampoco me dan miedo, puedo verlas posadas en mi brazo en mi pierna sin perturbarme. De hecho, me encanta cazarlas con la mano, por el mero hecho de poder hacerlo.

Volviendo al laboratorio, ahí esta, reptando sinuosamente por el suelo, con dirección desconocida. Me siento en la silla e inicio el programa de medición. Lo ejecuto, y el palpador empieza a medir la pieza.

No me siento a gusto, incluso siento cierta ansiedad en la boca del estómago. Me giro y vuelvo a verlo. Habrá recorrido unos cinco (¿?) centímetros como mucho, pero a mi me da la impresión de que está demasiado cerca. Algo me impele a salir del laboratorio, pero luego ¿qué?. No puedo ir a mis compañeros a decirles que por favor, maten al invertebrado.

Está claro, tengo que deshacerme de él por mí mismo. Con valor y arrojo. Pero, ¿cómo hacerlo? La sola idea de pisarlo me apabulla, me paraliza, me llena de algo parecido a asco, simplemente imaginando su cuerpo destrozado manchando la suela de mi zapato.

Hace tiempo, estando en las instalaciones de la Muela, me ocurrió algo similar, con un primo lejano de este. Aquel, todavía era más asqueroso ya que, si bien este aterrador centípedo rosa tiene formas de típico gusano, aquel de la muela estaba lleno de antenas y patas, como si fuese un ser de otro universo o de una dimensión alternativa en las que los insectos han evolucionado de una manera distinta. En aquel caso, un chorro de disolvente sobre el monstruo intergaláctico solucionó, y de manera rápida, nuestro encuentro.

Esta vez, no tengo disolvente a mano, así que echo mano del alcohol metílico que tenemos para limpiar la máquina. Abro el bote mientras me acerco con sigilo al bicho. Desde una distancia de un metro, alargando el brazo al máximo hacia la dirección del gusano, vierto un poco de alcohol hacia él.

Casi puedo sentir su agonía. Empieza retorcerse, girando sobre si mismo. Si tuviese cuerdas vocales, sus gritos serían espeluznantes. La parte del gusano que toca el suelo, abandona su color primigenio para pasar a ser negra, debido al contacto abrasador del alcohol. Pobrecillo, como intenta levantarse, alzando su cabeza al aire, buscando desesperadamente la salvación, intentando escapar del contacto asesino del líquido caído de no sabe donde.

Me vuelvo a sentar en la silla, con un torbellino de emociones atravesándome. Alguna de pena, por asesinar a sangre fría al insecto, y otras de profundo asco por el espectáculo dantesco y perturbador que el gusano ofrecía en su sufrimiento. Empiezo a verificar la medición y con remordimientos echo la vista atrás.

Todavía está moviéndose, aunque más lento, con menos energía. Las fuerzas lo están abandonando poco a poco. Me siento terriblemente culpable, la agonía del gusano está siendo demasiado larga, o al menos a mi me parece casi una eternidad. Cojo un poco de papel del rollo, lo arrugo y lo dejo caer sobre él. La adrenalina fluye por mis venas. Acto seguido, doy un fuerte pisotón sobre el papel. Respiro hondo, lo cojo con la mano y rápidamente lo arrojo a la basura.

Me dejo caer en la silla, aliviado por el fin de tan terribles sucesos y casi sin querer esbozo una sonrisa, pensando en lo patético de la situación. Un gusano, un pequeño gusano rosa, me ha hecho pasar un rato de vértigo. Qué curiosas son las fobias, y qué putas.

Luis Val

8 de octubre de 2010

6 de octubre de 2010

Viaje a Peñíscola, Asociación de Mujeres Sastaguinas

Antonio Enfedaque Sariñena
La Asociación de Mujeres Sastaguinas, de forma tradicional todos los años en su programa de actos organiza un viaje de fin de semana para sus afiliadas. Este año la zona elegida fue la provincia de Castellón, concretamente al pueblo de Peñíscola.

Comentaré que en esta ocasión el número de personas que se sumaron, al viaje, superó al de otras programaciones, ya que se llegó a las 120 plazas.
La empresa Guiral, de Caspe, con dos magníficos autocares de última generación, nos recogió a las 7 de la mañana en Sástago. En el viaje nos repartieron caramelos y de forma gratuita se rifaron cinco entradas gratuitas para en magnífico spa que dispone el Gran Hotel Peñíscola en el cual teníamos las correspondientes habitaciones reservadas.

Día soleado y con buena temperatura. Las dependencias del hotel, de 4 estrellas, de gran calidad, en la amplia sala de recepción pudimos contemplar una exposición de reproducciones de barcos de pesca y veleros, estupenda cafetería y salas de estar.

Después de acomodarnos en las habitaciones, los interesados en visitar el spa cogimos turno para el siguiente día, así como para los masajes, algunos baño en el mar y otros paseo por las cercanías del hotel, hasta la hora de comer.

Amplio comedor, con bufet libre, que disponía de una amplia variedad de ensaladas, primeros y segundos platos así como postres. Después de la comida, tiempo libre, salimos algunos hacia Peñiscola con la obligada visita al castillo del Papa Luna. Todo el conjunto histórico, magníficamente restaurado nos lleva a la edad media, las dependencias del castillo, con muebles de la época, albergan exposiciones de fotografía, sala de conciertos y en las bodegas una amplia información de lo que fueron los templarios, con reproducciones de guerreros a caballo, altos dignatarios de la orden, así como estandartes, bibliografía, armas de la época y los utensilios de los miembros de la orden, en fin un ejemplo de el estupendo aprovechamiento de todo el recinto, algo así quisiera yo, para el conjunto de nuestro Monasterio de Rueda, que después de las cuantiosas inversiones que se han hecho en su restauración, tan apenas se emplean en eventos como los que antes comento.

Después de la cena agradable velada de actuaciones musicales, baile y concursos que se prolongó hasta bien entrada la noche.
En la mañana del domingo, soleada y con una agradable temperatura, los entusiastas del mar se dieron su correspondiente baño, algunos de desplazaron a Benicarlo, otros anduvieron por el Paseo Marítimo y sesión de baños y sauna en el spa del hotel, que dispone de piscina climatizada, sala de relax, un conjunto de 6 jacusis con distintas temperaturas así como diversas duchas relajantes, sin olvidar las sesiones de masajes que por la mañana y después de comer aliviaron las dolencias de algunos de los /as/ excursionistas.

Antes de la salida, que estaba prevista a las 6 de la tarde, todo el grupo posamos para la fotografía de recuerdo. En el viaje de regreso paramos en Gandesa para estirar un poco las piernas, tomar algún refresco y la visita a los baños. Llegamos Sástago sobre las 9 de la noche, algo cansados, ya que los años no perdonan, pero contentos por el estupendo fin de semana que habíamos pasado.

Animamos a la Asociación de Mujeres Sastaguinas, a su Presidenta y Junta Directiva a que sigan con la programación de estos viajes que tanta aceptación tienen.

Semana Cultural 3ª Edad Sástago

SEMANA CULTURAL 3ª EDAD DE SÁSTAGO 13/9/ 2010

Antonio Enfedaque Sariñena. Junta Directiva

Como en años anteriores La Asociación de la Tercera Edad de Sástago celebra la semana cultural que tubo lugar, los días, del 13 al 18 del presente mes de septiembre. Conforme al programa establecido el lunes 13 se desarrolló el concurso de guiñote y parchís, con sesión de bingo. El mates 14 concurso de mus y rabino con partida de bingo. El 15 miércoles final del concurso de guiñote y homenaje a los centenarios de la localidad.

Entrañable acto este que se celebró en los locales de la Asociación. En el pasado 2009 fue una sastaguina , Concepción Sariñena, la homenajeada y este año han sido dos los centenarios presentes y protagonistas del acto. Isidro Ramón y Luís Barceló.

A las 6 de la tarde fuero recibidos, con un gran aplauso, por todos los asistentes al homenaje, que llenaba completamente el salón de actos. Llegaron acompañados por todos sus familiares, hijos, nietos y sobrinos que fueron acomodados en una mesa presidencial, a continuación el alcalde de la localidad, José María Calvo y el presidente de la asociación, Romualdo Furruz, pronunciaron unas palabras expresando la enorme satisfacción que tenían al celebrar el acto, fue Luís el que dio las gracias en unas cortas palabras, pues los dos estaban profundamente emocionados, los presentes les dieron un largo y fuerte aplauso, seguidamente les hicieron entrega de un marco plata con una foto de ellos.

No falto la tradicional tarta, con las velas de los 100 años, si bien fue el primero en apagarla, Isidro, con un rápido soplido. A continuación las mujeres de la asociación sirvieron en estupendo chocolate, para todos los asistentes terminando la velada con unas partidas de bingo. Desde estas páginas, la Junta Directiva y todos los miembros de la Asociación de la Tercera Edad les felicitamos de nuevo.

El 16 jueves se celebró las finales de rabino y dominó, a continuación Don José González Allepúz, médico del Hospital de Nuestra Señora de Gracia, de Zaragoza, sataguino de adopción, muy relacionado y conocido en nuestra localidad nos dio una interesante y amena charla con temas relacionados con problemas propios de las personas mayores, pasó una serie de diapositivas explicando el contenido de las mismas y los síntomas que se manifiestan con la aparición de las mencionadas enfermedades. Al final de la charla fue aplaudido y felicitado por los numerosos asistentes.

La Junta Directiva le da las gracias por la desinteresada colaboración que mantiene con este centro siempre que se le requiere para las actividades que se celebran.

El sábado 18, se suspendió el concurso de petanca por la fuerte lluvia en la hora que estaba programado. A las 12 horas, concurso de postres, destacando la gran participación de las mujeres del centro así con la enorme variedad y gran calidad de todos postres presentados, a las 14 horas comida de hermandad en los locales de la asociación a la cual asistieron 150 comensales, entre los que se encontraban la Presidenta de la Comarca de la Rivera Baja, Alcaldes de la zona así como representaciones de los centros de la tercera edad de los pueblos cercanos, con los cuales se mantienes estrechas relaciones sobre los temas propios de funcionamiento.

Al final de la comida se sirvieron los postres presentados al concurso, todos los comensales pudimos apreciar la exquisitez de los mismos, dando las más efusivas gracias a todas las participantes
Al final de la comida se procedió al reparto de premios de los diversos concursos, así como a la entrega de un pequeño recuerdo a todas las mujeres que participaron en el concurso de postres. A continuación se sorteó un magnífico televisor, de 42 pulgadas, de última generación siendo el afortunado ganador el sastaguino Sr. José Continente, terminando la tarde con unas animadas partidas de bingo.

El domingo día 19, para los mas madrugadores, en los porches de la Plaza de la Diputación, almuerzo de huevos fritos con longaniza y chorizo y su correspondiente vaso de vino, dando con esto por terminados los actos de la Semana Cultural 2010.

La Junta Directiva da las gracias a la empresa FRUTESA FINCAS DE GERTUSA Y MENUZA por la entrega desinteresada de las deliciosas frutas con las que contribuyeron en la comida de hermandad de la Asociación, así como a GRANJA GRACIA de Caspe por la entrega de los huevos para el almuerzo del domingo.

1 de octubre de 2010

Más Viejo que las Boletas

José L. Tella
Estación Biológica de Doñana (CSIC)
41090 Sevilla
Correo electrónico: tella@ebd.csic.es

¿Sabe usted qué es una boleta? Probablemente no, y probablemente dependa de la edad que tenga. Yo era todavía muy crío la primera vez que oí decir a un abuelo de Cinco Olivas: “más viejo que las boletas”. No tardé mucho en saber a qué se refería. Una de esas veces en que acompañaba a mi padre en el tractor para inspeccionar la todavía para mí misteriosa y desconocida huerta del pueblo, me bajé en Los Tollos y me adentré en lo que me parecía una enorme chopera. Desde ahí, vi de cerca un pajarraco volando, blanco y negro, del tamaño de una cigüeña pero con las patas cortas, el pico curvado, la cabeza pelada y una especie de melena despeinada. Para colmatar la excitación, cruzó el río y se metió en una cueva, cagada y llena de palos, en el cabezo de enfrente. Justo por donde pasa ahora la carretera de Alborge a Alforque. ¡Ahí tenia el nido! Esa era la boleta de la que me habían hablado, que no era otra cosa que el alimoche, aquel “buitre sabio” que popularizó Félix Rodríguez de la Fuente por ser capaz de romper huevos de avestruz a pedradas para comérselos.

Pero, ¿por qué decían los mayores aquello de más viejo que las boletas? Rápidamente me lo aclaró un grupillo de abuelos mientras tomaban la fresca en la calle. Haciendo memoria, recordando la mili, la barca de Alforque y otros avatares, concluyeron que conocían ese nido desde hacía ¡por lo menos 45 años! Por si fuera poco, sus padres ya les habían hablado de ese nido. Probablemente, esas boletas eran más viejas que todo el grupo de abuelos juntos.

No sé si por el dicho, o por su extravagante aspecto, esas boletas me metieron un gusanillo en el cuerpo que avivó mi curiosidad durante muchos años. La moto, mi querida “Enriqueta”, supuso un gran cambio. No sólo me llevaba a las fiestas de los pueblos, cada vez más lejanos, sino que además me permitió prospectar montes cuya existencia antes ni conocía. Y encontré con sorpresa que había muchas, muchas más boletas de las que me podía imaginar. Por los cabezos del Ebro, por el Monte Bajo, por el Monte Alto,…. Bastaba con darse una vuelta por la huerta de Sástago, subir con la romería de la Virgen del Montler, pasearse por el Monasterio de Rueda, o acercarse a cualquier muladar de pueblo o paridera en el monte para encontrarse de cerca con las boletas. Y empecé a apuntar en cuadernos todas las que veía, dónde y cuándo, cómo eran los nidos, cuantos pollos tenían,… Poco sospechaba que eso lo seguiría haciendo, de forma ya profesional, hasta hace pocos años. Empecé la carrera de Biología en Barcelona, y ya en el primer curso tuve claro que debía estudiar esos pajarracos, de los cuales a mediados de los 80 no se sabía apenas nada. El acceso a un coche fue otro gran paso: podría recorrer ya todo el Valle del Ebro, desde Mequinenza a Las Bardenas navarras, desde Alcubierre a los montes de Belchite, buscando las boletas.

Casi 30 años más tarde, después de recorrer todos esos montes, anillar cientos de boletas, seguirlas con emisores y muchas otras cosas más, sabemos ya mucho de las boletas: cómo y dónde viven, qué necesitan, qué problemas tienen y cómo solucionarlos. Y sabemos que no viven tanto como reza el dicho. De hecho, no viven más que cualquier otra ave de su tamaño. Entonces, ¿de dónde viene el dicho? La razón no es otra que su costumbre de utilizar año tras año, década tras década, la misma cueva donde construyen sus toscos nidos. Cuando moría una, siempre había otra que ocuparía el mismo nido. No es de extrañar entonces que la gente pensara que se trataba de un ave extremadamente longeva, de vida casi eterna.

Eso fue siempre así, y así lo reflejó la memoria de nuestros mayores. Hasta que empezaron a desaparecer. El nido del camino de Alforque fue de los primeros, a comienzos de los años 90. Y no por construir una carretera justo debajo, que no parecía importarles lo más mínimo. Una de las boletas apareció envenenada en un muladar cercano, de la otra nunca más se supo. Y todavía hoy no han vuelto las boletas al nido. Este fue uno de los primeros casos, pero le siguieron muchos más. Ocurrió que por esos años llegó a España una nueva enfermedad del conejo de monte, la neumonía hemorrágica. Y fue quizás peor que la mixomatosis de los años 50. Así, en muy pocos meses el conejo pasó de ser incluso una plaga para los cultivos en algunos de nuestros montes, a una especie rara. Quedó aproximadamente un diez por ciento de los que había. Y, ante esta situación, pronto surgió la práctica ilegal de envenenar los montes, con la idea de acabar con los zorros y que así hubiera más conejo. La boleta, como un buen buitre observador que es, rápidamente encontraba los cebos de carne envenenada y caía muerta por doquier.

En pocos años pudimos comprobar, tristemente, que las tres cuartas partes de los nidos de boleta de todo el Valle del Ebro desaparecieron al morir envenenadas. Y eso no fue todo. Luego llego el “mal de las vacas locas”. Con el tiempo, como ha pasado con otras alarmas sanitarias desproporcionadas (léase gripe aviar, o más recientemente gripe porcina), se vio que el mal no era para tanto. Pero tuvo efectos colaterales. Con la aplicación de estrictas normas sanitarias europeas, se clausuraron muladares, se prohibió abandonar el ganado muerto en el campo, y el ganado muerto en las granjas pasó a ser retirado por camiones para su eliminación. Antes, todos estos animales muertos los eliminaban de forma natural los buitres y las boletas. Ahora, las pocas que quedan apenas tienen qué comer. Y todo esto no pasó sólo en nuestra comarca, sino en prácticamente todo el país. Un país que era el que más boletas albergaba del mundo. Y, en menos tiempo del que vive una boleta, la especie ha pasado de ser abundante a encontrarse ahora catalogada En Peligro de Extinción.

No son pocas las veces que alguien me pregunta: con la de problemas que hay en el mundo, ¿merece la pena dedicar tantos esfuerzos al estudio y conservación de tal o cual especie en peligro de extinción? ¿Qué justificación tiene? Y, ya con un tinte más materialista, tan extendido en nuestra sociedad: ¿De qué sirve? Algunos contestarían que no hay que buscarle ni justificación ni utilidad. La boleta, como cualquier otra especie, comparte nuestro mundo y tiene tanto derecho como nosotros a vivir en él. Es una criatura de Dios, o de Alá, dirían los más religiosos. Otros, con una visión más funcional, dirían que son muy útiles pues junto con otros buitres limpian nuestros montes de animales muertos, de forma rápida, eficaz, y además gratuita. Algunos dirían que hay mucha gente que disfruta de la naturaleza; hay quienes vienen de lejanas partes del mundo para ver o fotografiar nuestras boletas, y tienen los mismos derechos que quienes disfrutan del fútbol o de la lectura. Que no se las quiten.

Los estudiosos de la naturaleza dirían que esta especie, como cualquier otra, es imprescindible pues cumple su función única, como la pieza de un gran puzzle. Y cuando se pierden muchas piezas el puzzle se deshace, como se está deshaciendo la naturaleza en todo el mundo. Los más preocupados por el futuro de la humanidad argumentarían que la extinción de especies es un preludio del futuro que le espera a la misma. Siempre hemos dependido de la naturaleza (agricultura, ganadería, pesca, clima,..), y mal podremos hacerlo si la seguimos destrozando a este ritmo. Si las boletas ya no se hacen viejas, quizás nosotros no tardemos en seguir, aunque más lentamente, el mismo camino.

Todos estos argumentos los he oído y leído tantas veces que me pasa como con los telediarios: cuando ves día tras día los muertos por hambre o sequía en el Tercer Mundo, las tragedias por inundaciones y otros desastres que serían naturales de no ser que hemos vuelto loca a la naturaleza, y demás catástrofes, al final te inmunizas, lo asumes casi como natural, y sigues cenando opíparamente. Así, quizás no utilizaría esos argumentos, por muy ciertos que sean. La verdad a veces aburre. Y no es menos verdad que me gustaría que no se extinguieran las boletas para que mis nietos pudieran decir a sus nietos que “fulano era mas viejo que las boletas”. Y que sus bisnietos no tuvieran que buscar en Internet, o cualquiera que sea el sistema entonces, para saber qué era una boleta. Cuando sólo queden en los museos. Cada vez que se extingue una especie, una parte de nuestra cultura muere con ella. Y una parte de nuestros recuerdos.

Biografía

José Luis Tella Escobedo nació en Cinco Olivas en el verano de 1967. Estudió Ciencias Biológicas en la Universidad de Barcelona e hizo su doctorado en la Estación Biológica de Doñana. Obtuvo el 1er Premio Nacional Joven de Ciencia y Tecnología en 2001, y actualmente dirige un equipo como Profesor de Investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas. Aunque desde un principio centró sus investigaciones en el estudio y conservación de aves en el Valle del Ebro, su trabajo abarca proyectos en países como Canadá, México, Holanda, Argentina, Guatemala, Bolivia, Mauritania, Marruecos, Senegal y Kazajistán. Autor de casi doscientas publicaciones en prestigiosas revistas científicas y miembro de numerosos comités nacionales e internacionales, se encuentra entre los científicos más citados del mundo.

Pie de Foto:













Una de las últimas boletas
Reportaje enviado por:  Antonio Bolsa Galindo

Historias del Monte Bajo

La leyenda continúa........

Después de escribir el relato El Más de la Venganza, volvemos a relatar las peripecias de esta pareja de amigos que cada vez se acercan mas a una pareja de leyenda asombrosa, esta vez en dos historietas entremezcladas que espero sean del agrado de todos los lectores del Blog.

Es costumbre el día del desvede en toda la comarca del Bajo Aragón, que los cazadores que tienen el Más arreglado, van el día de antes a preparar una buena cena, dormir en los Mases en camastros o en sacos de dormir y al amanecer emprender la caza que sean capaces de levantar y tengan buena puntería para abatir.

En el desvede del 2004, nuestros protagonistas tenían que cenar en el más, pero nadie quiso hacer esa noche la cena, no se pusieron de acuerdo. De modo que alguien propuso ir a cenar a un conocido restaurante de Bujaraloz y todos estuvieron de acuerdo en hacerlo.

Hacia Bujaraloz se fueron los ocho de la cuadrilla y como no habían reservado mesa, tuvieron que esperar a que quedara sitio para cenar. Entre cerveza y cerveza, contaban historias de cosas que les habían ocurrido al uno o al otro.

Ángel contó una historia referida a su amigo Agustín y a la perra de este.

Agustín tenia una perra que solo le hacia falta hablar y un día cazando la zona con Ángel, fueron a parar a una paridera del monte. Desde lejos habían visto una furgoneta blanca que reconocieron como la del José, por lo visto había dejado la furgoneta en la paridera y se había ido a cazar por los alrededores, dejaron las escopetas abiertas sobre la capota de la furgoneta y la perra empezó a olisquear y al momento desapareció.

- ¡Esta es la furgoneta del José!
- ¡Si, estará por aquí cerca cazando!
- ¡Toma un cigarro!
- ¿Ande esta la perra?
- ¡No se, se ha ido por detrás del corral!

Aun no habían terminado la frase, cuando un enorme alboroto les llamo la atención a los dos cazadores.
Dentro del corral se oían animales correr, batir de alas de gallinas y la perra ladrando y corriendo de un lado para otro.

- ¡Mecaguenla!, ¿la perra que esta haciendo¿
- ¡Pues que debe haber gallinas dentro de la paridera y la perra ha entrao y la ha liao, pero del todo la ha liao, menudo follón!.
- ¡Lindaaaaaaaaaaaaaaa, ven aquí, Lindaaaaaaaaaaaaaaaa!.
- ¡Linda leches, ya veras la que va a armar la linda de los coj…….
- ¡Te voy a pegar cuatro tiros, Lindaaaaaaaaaaaaaaa, ven aquí!

De pronto todo quedo en silencio, Agustín miro a Ángel que asentía con la cabeza y el morro preto.
Por la esquina del corral aparece la perra moviendo el rabo, con los ojos radiantes y en la boca una gallina más grande que ella, la tenia agarrada con la boca por el cuello y la gallina parecía que estaba más muerta que las dos perdices que llevaba Agustín en el chaleco.

- ¡Mecaguen la perra del copón! ¡Linda, pero que has hecho, trae aquí esa gallina, pero como puedes confundir una gallina con una perdiz, te voy a matar, ven aquí!.

La perra no quería soltar su presa de ninguna manera, pero era muy grande y pesaba mucho, aunque la perra levantaba la cabeza, la gallina arrastraba y no podía escaparse de su amo que la cogio e intento quitarle la presa que tanto le había costado atrapar y que no estaba dispuesta a soltar.
Agustín tardo un buen rato en hacer que la perra soltara la presa, pero al final consiguió quitarle la gallina a la perra.

- ¡Pero tú te das cuenta de lo grande que es esta gallina si parece un pavo!.
- ¡Es que es un pavo!.
- ¡Que no, que los pavos son mas oscuros!.
- ¡Pero chiquer que no ves que tiene la cabeza calva!.
- ¡Pues ahora que lo dices es verdad, pero Linda que has hecho, te has cargao un pavo del dueño de la paridera, ahora que hacemos coooooo.
- ¡Ay chiquer, yo no se nada pero no vas a ir toda mañana con el pavo colgando, como te vea el dueño te pega dos tiros y con razón.
- ¿Mira a ver si esta la furgoneta abierta por casualidad?.
- ¡Abierta esta, la puerta de atrás por lo menos.

Agustín ni corto ni perezoso abrió la puerta de la furgoneta y tiro el pavo dentro.

- ¡Cuando veamos al José le diremos que le hemos metido una perdiz en la furgoneta.
- ¡Vale lo que tú digas Agustín, pero esa perra te va a traer muchos disgustos mira que no distinguir una perdiz de un pavo.
- ¡Que quieres pobre animal ha visto plumas y que se sabe ella animalico.
- ?Bueno que, vamos a seguir cazando o guisamos el pavo aquí mismo¿.

Ángel y Agustín emprendieron de nuevo la cacería, aun no habían perdido de vista la paridera cuando por el otro lado apareció José el dueño de la furgoneta se dirigió a la parte trasera, abrió la puerta y casi se cae de espaldas al ver un enorme animal aleteando dentro de la furgoneta, lo pillo tan de improviso que un supo identificar que clase de pajarraco era, cerro la puerta de golpe y se quedo mirando intentando descubrir que bicho era.
El estruendo hizo girar la cabeza a los dos cazadores y la perra se revolvió inquieta.

- ¡Quieta.., no te muevas de aquí Linda, que te pegaran dos tiros.
- ¡Menudo susto le has pegao al José, anda que la llevais buena la perra y tu.
- ¡Yo no le he pegao ningún susto ha sido el pavo.
- ¡Así que una perdiz grande muerta dentro de la furgoneta, no la llevas mala.
- ¡Que culpa tengo yo que haya resucitao el pavo.
- ¡No vas a tener mal pavo chiquer, como se entere que has sido tu el que casi lo mata de un infarto.

Entre una verdad y una mentira, fue pasando el rato hasta que el camarero les dijo que entraran a cenar, los ocho así lo hicieron y se pusieron moraos de cenar en el famoso restaurante.

Después de la cena retornaron al Mas para pasar la noche, mientras se acercaban a los coches como era de madrugada , alguien propuso matar unas liebres por el monte de modo que antes de llegar al Más se adentraron unos por un camino a la derecha y otros por uno a la izquierda.

Agustín y Ángel tuvieron suerte y pronto se hicieron con cuatro liebres al bajar del coche para recoger la ultima vieron las luces. Venían por un camino en dirección a donde estaban ellos, las luces parecían fantasmagóricas envueltas en una nube de polvo, luces abajo y luces arriba.

- ¡Mecaguen eso que viene es un todo terreno sospechoso vamos a salir de aquí pitando Agustín.
- ¡No te preocupes, no puede ser que vengan a por nosotros.
- ¡Monta que nos vamos

Salieron a toda velocidad por el camino entre una espesa nube de polvo, por el retrovisor Ángel veía como las luces se acercaban poco a poco.

- ¡No podemos quitárnoslos de encima chiquer, cada vez están mas cerca!.
- ¡Písale al acelerador dale caña!.
- ¡Te piensas que esto es un Ferrari o que chiquer!.
- ¡No te preocupes lo tengo todo controlao!.

Agustín abrió la guantera del coche, rebusco entre los papeles y saco una navaja de unos 5 centímetros la abrió miro a Ángel con una sonrisa.

- ¡Pero donde vas con esa navaja de juguete chiquer!.
- ¡Suficiente para cargármelos a todos!.
- ¡Pero a quien te vas a cargar tu chiquer con esa mierda de navaja!.

El todo terreno estaba pisándoles los talones, era como un coche fantasma entre tanto polvo, estaban a unos pocos metros.

- ¡Para el coche aqui mismo chiquer, que a estos me los cargo yo ahora mismo, o se identifican o me los cargo!.
- ¡Estas loco como una cabra Agustín!

Ángel paro el coche, Agustín salio con la navaja en una mano y la escopeta en la otra, el todoterreno paro también la nube de polvo se hizo mas espesa.
Agustín Monto la escopeta se apoyo en el techo del coche y lanzo la orden.

- ¡Alto quien vive!,!identificación o los liquido a todos, curas u obispos!.

Pasaron unos largos segundos antes que desde la ventanilla del coche se oyera…

- ¡Que somos nosotros coooooooooo!, este es capaz de empredenos a tiros.
- ¡Cooooooooooo, estas loco u que…., no ves que somos nosotros!.

Cuando se disperso la polvareda se vio con claridad toda la escena, el todoterreno era la furgoneta de los amigos que se habían metido por el camino de la izquierda y que venían al encuentro de Ángel y Agustín para ir todos juntos al Más a dormir, le habían puesto en el techo de la furgoneta un juego de luces portátil para ver mejor por los caminos del monte.

- ¡A quien se le ocurre venir a toda mecha persiguiéndonos a las tres de la mañana por un camino de monte que no lo transita ni las liebres
- ¡Pero a ti quien te perseguía, si veníamos en son de paz y nos encontramos a un emboscao con la escopeta encañonada echándonos el alto, anda chiquer estas como una cabra.
- ¡Otra vez os lo pensareis mejor antes de venir como veníais, que parecíais una nave extraterrestre, con tantas luces entre el polvo.
- ¡Bueno que, emboscao, nos vamos a dormir u que, que mañana tenemos que tirarle a las perdices y me paice que no las vamos a ver como no durmamos un poco.

Montaron en los coches y se fueron hacia el Más a dormir, mañana será otro día, quizás mejor que el de hoy.

Todo lo relatado, los nombres y los hechos descritos en este relato son pura fantasía, por si acaso.
Forman parte de las Historias del Monte Bajo y de dos personajes de leyenda….
El Garri y El Dubi.

Tertulias de la Manqueta

El Castillo La Palma

Muy poco, hasta el momento, es lo investigado sobre el Castillo de Palma en término de Sástago. No se encuentran fuentes romances y hay que investigar sobre las fuentes árabes poco claras y complejas.

El castillo es un “ hins” ( fortaleza defensiva ) en la Marca Superior de al- Andalus y Distrito de Zaragoza. Está ubicado a la orilla derecha del río Ebro ( Nahr Ibrush ) y encima del monte Ourrosa.

Al-Razí, en su Geografía, nos cita los “ hins “ y sus topónimos de la Marca Superior y entre ellos son importantes los que tienen un nexo con Escatrón- Sástago. Nos los describe así:
ALCAÑIZ, Topónimo Qannis, es un “ hins “ de los alfoces en el que Abd Al-Rahaman III acampó en el mes de Junio del año 935 cuando iba en dirección al asedio de Zaragoza. Está a 25 millas de Zaragoza
CHIPRANA, Topónimo Sibrana, es según Al- Idrisi, un “ hins “ a orillas del Ebro a 8 millas de Albarca y 50 de Barcelona. Es una de las Plazas fronterizas del Sarq al- Andalus y pertenece a la región de Zaragoza.
RUEDA DE JALON, Topónimo Ruta al Yahud, es un castillo muy fuerte de Zaragoza y bien defendido y yace sobre el río Xalón. Está a 23 millas de Zaragoza. Fue residencia de la Dinastía de los Banu-Hud, y forzosa residencia desde el año 1110.
CADRETE, Topónimo Qadrit, Es un “ hins “ eregido por el Califa Abd Al-Rahaman III para asediar Zaragoza, sede del rebelde Muhammad b. Hasim al-Tuyibi en el año 935 y en el mes de Noviembre.
WARSA, Topónimo islámico. Al-Razí y Ibn Hayyen, identifican Warsa como Warsa = Ourrosa = Rosa y dicen que es un “ hins “ fuerte sobre el río Ebro.

Diversos Autores han intentado localizar este Warsa, mencionado también en el “ Muqtabis “, sin resultado. Lo han asociado a Ores, Huesa del Común,… pero sin convencimiento por falta de documentación. Llegados a este punto, y sin poder justificarlo, me atrevo a decir que es muy posible que este castillo de Warsa-Ourrosa- Rosa , sea el hoy llamado castillo de Palma en término de Sástago. Coinciden varios datos de las narraciones árabes. Está sobre el monte Rosa, existe el camino a Rosa, la Dehesa de Rosa, el Ebro…
Otro dato muy importante para creer que Warsa es el castillo de Palma sobre el monte Rosa, es que el Califa Abd al- Rahaman III acampó en Alcañiz cuando iba por la ruta de Leónica a Contrebia Belaisca al asedio de Zaragoza. Era el mes de Junio del año 935. Warsa estaba ocupada por Ibrahín b. Hasim, hermano del Said de Zaragoza Muhammad y fiel a éste en la rebeldía contra Abd Al- Rahaman III. Muhammad se había desplazado a Warsa para frenar el avance del ejército del Califa. Afin de reducirlo y apoderarse del castillo, Abd Al- Rahaman III envió desde Alcañiz contra él al Caid Muhammad. Said Mundir al-Qurasi, quien tomó Warsa tras ser concedido el aman a sus pobladores. Acto seguido Muhammad dejó la fortaleza guarnecida y acudió al sitio de Zaragoza con su ejército. Abd Al- Rahaman III se había ido desde Alcañiz a Cadrete, donde lo fortificó para asediar Zaragoza.

Ibn Hayyan, en el Muqtabis ( II-I, 309 ), Y Al- Udrí, nos hablan de un lugar llamado Warsa junto al Ebro, donde Musa Ibn Heazim derrotó a Harit Ibn Bazí en el año 842.

La última referencia de Warsa, se remonta al 18 de Abril de 941 , fecha en la que el Califa Abd Al- Rahaman III dio a Yahya Ibn Hasim al- Tuyibi ( ya perdonado de su rebeldía ), el mando sobre los castillos de Lérida, Warsa y María. Después el Califa regresa a Córdoba por la ruta de Muel, Daroca, Gallocanta y Molina.

Con la toma de Zaragoza en 1118 por Alfonso I el Batallador, empieza la Reconquista aragonesa. Se crea la Milicia en Belchite, la cual es Confirmada por Alfonso VII de Castilla en el Concilio de Burgos de 1136 . Se otorga la Tenencia a Galindo Sanz para sí y sus herederos. Al morir sin descendencia le sustituye su hermano Lope Sanz y a éste su hijo Galín Ximenez
Este gran Señor, conquistó el valle del río Aguas Vivas ( Albayar ) hasta la desembocadura en el Ebro al lado de La Zaida y Romana.Así mismo, y con la conquista de Híjar en 1148, y Albalate en 1149, terminó de conquistar el valle del río Martín hasta Escatrón..Fue el Señor de Belchite y ríos Martín y Aguas Vivas.

A la muerte de Galín Ximenez, sobre el año 1175, se fragmentó su Señorío entre sus hijas. En este año el Rey Alfonso II está en Belchite y decide dar un cambio a la política de Tenencias. Hay que repoblar las conquistas y roturar las tierras . Se da entrada a las Ordenes Militares, al Císter en Escatrón, San Juan de Jerusalem , La Orden de Calatrava en Alcañiz etc.
Rodrigo de Estada, que estaba casado con Guillerma hija de Galín, tiene la Tenencia de Hijar en el año 1189. A la muerte de Rodrigo, coge la Tenencia de Híjar Miguel de Luesia, Caballero, que estaba casado con Mayor, nieta de Galín Ximenez e hija de Rodrigo de Estada.
Este Miguel de Luesia es el Caballero que llevaba el Estandarte real de Pedro II de Aragón en la batalla de las Navas de Tolosa en 1212.Al año siguiente acude con el Rey a la famosa batalla de Muret, donde muere en batalla junto a Pedro II y otros Nobles aragoneses, a manos de Simón de Monfort en 1213.

Doña Sancha, esposa y viuda de Galín Ximenez, y desde el palacio de Sástago, dona el castillo y villa de Romana al Monasterio de Rueda en 1202. Firma la conformidad, su nieta Mayor y su esposo y yerno Miguel de Luesia. Vivian todos en el palacio de Sástago.
Se dice en el documento que las tierras se donan tal como las tuvo Galin Ximenez.

En el año 1242, el Rey Jaime I el Conquistador, ordena a Esteban de Aljafería, que era Baile General, que concuerde las diferencias por los límites entre Romana, Sástago, Escatrón y Monasterio de Rueda. Se levantan las Actas correspondientes y firman los Tenentes y propietarios la conformidad a los nuevos Límites. Entre estos Caballeros están:Berenguer de Entenza ( yerno de Miguel de Luesia y esposo de Guillerma de Luesia ), Artal de Alagón, Portolés de Valimaña, García de Orós, Ximenez Samper, Domingo Gerthusa y Pedro PALMA de Valimaña.

Los Valimaña eran Caballeros militares y tenían fuertes posesiones en Escatrón, Valimaña y Romana y siempre en dominios de Galin Ximenez.En Escatrón tenían su palacio y hoy todavía son identificables sus restos.
Pedro Valimaña intervino en la Conquista de Valencia y en las Reparticiones que hizo Jaime I, le otorgó Las Cuevas de Berig. Este Noble está enterrado en el Monasterio de Rueda.

Llegado a este punto, ¿ es Pedro PALMA Valimaña el Tenente del castillo de Palma y de ahí lo de “ castillo de Palma “? , es muy posible.

José Luís Garijo
2010